- Ajustar el presupuesto a las mejores ofertas para disponer de un administrador que gestione la comunidad de vecinos. Desde AFI ofrecemos tarifas muy competitivas que seguro que se ajustan a su comunidad.
- El mantenimiento de los ascensores supone uno de los mayores gastos de una comunidad, pero también se puede reducir instalando un mecanismo de maniobra selectiva, permiten activar la llamada del ascensor que se encuentra más cerca del punto requerido y así reducir los viajes de los ascensores en vacío. Asimismo, se puede activar un control de la iluminación para evitar que esté constantemente iluminado.
- Durante los meses de invierno puede reducirse el gasto en calefacción central, ya sea manteniendo menos temperatura todo el día o apagándola en ciertos tramos horarios.
- En la medida de lo posible, se pueden espaciar los días de limpieza del edificio (pueden ser un día a la semana en lugar de varios, por ejemplo). Los propios vecinos pueden encargarse de conservar limpias sus dependencias más próximas (vestíbulos, escaleras…).
- Se pueden reducir coberturas del seguro que, una vez revisadas y analizadas, tengan poca o nula utilidad para el edificio o para los intereses de los propietarios.
- Puede existir más de un suministro eléctrico, por lo que es apropiado unificarlos. Hay que contar con la ayuda de un especialista que revise la contratación eléctrica para determinar la mejor potencia y la más necesaria. Es importante revisar la factura para detectar cualquier tipo de penalización por sobrepasar la potencia.
- Revisar y mantener los principales servicios y componentes del edificio (calderas, ascensor, cuadro eléctrico, etc.) para evitar su deterioro. Si no, el arreglo puede salir muy caro.
- Para las viviendas que dispongan de zonas ajardinadas es conveniente utilizar luminarias y globos de farola, ya que minimizan la contaminación lumínica al dirigir el flujo luminoso hacia el suelo, sin que ‘escape’ luz hacia el cielo.
- Intentar no realizar reformas ni obras innecesarias. Si aún así, es necesario, se puede acudir a subvenciones y ayudas oficiales para sufragar algunas reformas y obras en el inmueble (calderas, ascensor, etc.), y así abaratar su coste.
- Las comunidades de vecinos, por norma general, soportan un gran gasto en la factura de la luz mensual. La factura suele estar dividida entre iluminación de zonas comunes, ascensores y garaje. ¿Sabía que cambiando las bombillas o la potencia contratada puede reducir su factura de la luz? Por ejemplo, los sistemas de iluminación inteligente y de temporización en las zonas de paso son los más recomendables para una comunidad, ya que se apagan las luces automáticamente transcurrido un tiempo. Si a ello se une el uso de lámparas de bajo consumo y fluorescentes, el gasto en iluminación se puede reducir en más del 75%.
Como vemos el abanico de opciones para ahorrar es muy amplio aunque depende de las características del edificio y del número de vecinos que compongan la comunidad. Desde AFI realizamos estudios individualizados de cada comunidad para aplicar los mejores sistemas de ahorro. No dude en contactar con nosotros si desea más información.
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