Un buen mantenimiento del edificio evitará goteras, bloqueo de las bajadas de agua e inundaciones
Estamos en otoño y con él empiezan a llegar las lluvias, y algunas veces la famosa ‘gota fría’. Aunque la Agencia Estatal de Meteorología no prevé que las precipitaciones para este año se salgan de lo normal, sí que pueden darse alguna situación puntual de lluvia más o menos fuerte.Por eso es clave un buen mantenimiento del edificio para que pueda hacer frente a esta temporada.
Para llevar a cabo ese mantenimiento del edificio frente a las lluvias lo mejor es que acuda a su administrador de fincas para que le aconseje que pasos debe seguir. En el caso de AFI, nosotros contamos con un servicio al cliente que ofrece una atención inmediata, lo cual ayudará a resolver su situación de manera rápida y además, con un ahorro en la administración de fincas.
Pero si no tiene un administrador de fincas como AFI y quiere realizar ese mantenimiento del edificio lo mejor es seguir los consejos de la Dirección General de Protección Civil y Emergencias y de otros organismos:
1- Revisar el estado del tejado. Así se evitarán filtraciones y goteras en los pisos debido a posibles grietas. Esa revisión también sirve para eliminar e impedir la acción de hongos y otros agentes nocivos y para comprobar el estado de la impermeabilización.
2- Revisar las bajadas de agua del edificio. Uno de los motivos de esta revisión es eliminar las hojas caídas de los árboles que se pueden acumular en los canalones de desagüe, por ejemplo. Esas hojas pueden bloquear los conductos y el agua que se estacione allí puede convertirse en un buen caldo de cultivo para insectos, bacterias y otros agentes que pueden perjudicar las paredes o las canalizaciones. También es importante comprobar que las bajadas de agua no tienen zonas perforadas u oxidadas.
3- Revisar los desagües próximos. Este es un tema que corresponde al ayuntamiento, pero no está de más que a través de tu administrador de fincas, te intereses por el estado de los desagües de tu zona, para saber si van a funcionar con garantías en caso de lluvias fuertes o si es necesario reclamar algún tipo de actuación.
4- Medidas de protección de los sótanos, garajes y locales con posibilidad de inundación. En estos lugares es conveniente disponer de las herramientas necesarias para sacar el agua, como bombas de agua, y contar con elementos que puedan tapar las rendijas de puertas y ventanas para evitar que entre el agua.
5- Calefacción. En el mantenimiento del edificio en esta época, con o sin lluvias, es fundamental revisar el funcionamiento de la bomba de calor y purgar los radiadores (si la comunidad de vecinos cuenta con un sistema de calefacción), para tenerlo todo preparado ante la llegada del frío.
6- Protege los elementos del jardín. Si la comunidad de vecinos tiene zonas comunes al aire libre (como piscina o jardines) ten en cuenta que el agua puede estropear el mobiliario, así que habrá que protegerlo. Y la piscina lo mejor es que esté tapada y más si ha recibido un tratamiento de limpieza previo.
7- Instalaciones eléctricas. Comprobar bien su aislamiento y que no existan dispositivos rotos o deteriorados que permitan la entrada de agua, para evitar cortocircuitos y otros problemas.
Con estas medidas, el mantenimiento del edificio para las lluvias de otoño será perfecto. Si tienes alguna duda consulta con tu administrador de fincas. En AFI, siempre estamos dispuestos a ayudar a nuestros clientes para que solucionen de manera inmediata cualquier problema que pueda surgir.
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